Para formar parte de la familia StarSec, nuestro talento humano debe superar un estricto proceso de selección. Además, es constantemente capacitado en el desarrollo de sus habilidades conceptuales (terminologías y normativas), habilidades técnicas (procedimientos operativos) y habilidades humanas (empatía, asertividad y motivación), logrando así convertirlos en profesionales de seguridad.